El ADN ambiental permite la extracción de ADN de diferentes tipos de muestras ambientales, como el agua, el suelo, el aire, para detectar especies o evaluar su diversidad. El laboratorio está ubicado en Santa Marta.
Colombia ya cuenta con su primer laboratorio móvil de ADN ambiental. Fue inaugurado este martes, 12 de julio, y contó con la participación del Embajador de Francia, Frédéric Doré, e integrantes de las autoridades locales, entidades del Sistema Nacional Ambiental y académicas, del Instituto de Investigaciones Marinas y Costeras (Invemar) y de la Universidad Jorge Tadeo Lozano.
De acuerdo con Invemar, este laboratorio busca transformarse en una herramienta para el estudio de la biodiversidad y está orientado a reforzar la cooperación científica, tecnológica e innovadora entre Colombia y Francia.
Además, añade la entidad, “de generar conocimiento científico que esté al servicio de las autoridades locales y nacionales para la creación de políticas públicas necesarias para la protección de los valores ambientales y el desarrollo del país”.
Esta técnica es importante para la investigación, porque permite la extracción de ADN de diferentes tipos de muestras ambientales, como el agua, el suelo, el aire y sirve para detectar especies o evaluar su diversidad. Pero, advierte la entidad, “en los ecosistemas acuáticos, realizar este tipo de análisis es un reto debido a la variabilidad y complejidad de estos ecosistemas”.
En los últimos años, esta técnica se ha empleado como una herramienta para evaluar y monitorear las especies marinas, ya que permite identificar los taxones (que son los grupos de organismos emparentados) presentes en una gran variedad de ambientes.
Francisco Arias Isaza, director de Invemar, explicó que este laboratorio es importante “para la declaratoria de dos nuevas Áreas Marinas Protegidas: la Reserva Natural Cordillera Submarina Beata en el Caribe, y el Distrito Nacional de Manejo Integrado Colinas y Lomas de la Cuenca Pacífico Norte, áreas con las cuales Colombia alcanza la meta de proteger el 30% de sus aguas jurisdiccionales marinas anticipándose 8 años al plazo fijado para el año 2030″. El laboratorio está ubicado en Santa Marta.
El Espectador
12 de julio de 2022
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